El avión llegó a las 12:30am a París, Francia. Fuimos en coche hasta Disneyland. Una vez allí, llegamos a la recepción. Estaba ambientada en el oeste. Una vez nos dieron la llave a mi padre y a mí, nos encaminamos hacia la habitación en la que pasaríamos cuatro días. Para llegar a la habitación, había que hacer un camino bastante largo por los alrededores de la recepción. Hacía mucho frío, ya que estábamos en diciembre.
Una vez desechas las maletas, fuimos al parque Disneyland. Estaba dividido en dos partes; una de atracciones y otra de cosas para ver, como el castillo de Disney. Las dos partes eran preciosas. A medida que caminabas, te encontrabas a diferentes personajes de Disney. La gente hacía cola para hacerse fotos con ellos. La gran mayoría de las atracciones eran cubiertas. Todas estaban ambientadas en algo; Buscando a nemo, la casa del rock… y también eran muy divertidas.
A la hora de comer, había diferentes puestos de perritos calientes, y un McDonald’s muy grande donde solía comer la mayoría de gente, por ello, había como mínimo media hora de cola. Era todo muy caro y la comida no era demasiado buena. Te alimentabas principalmente de pizzas y hamburguesas.
El segundo día por la tarde, al bajar al parque, Mickey Mouse me vino por detrás i me cogió. ¡Me dió un susto enorme! Iba vestido de explorador. Me hice una foto con él.
Un día antes de irnos, decidimos ir a La Torre Eiffel. Era preciosa. Había mucha cola para subir, por lo menos cuatro horas. A parte, subir también era muy caro, así que volvimos a Disneyland. Preparamos las maletas para marcharnos al día siguiente.
¡Había sido un viaje excelente!
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